Mercan se refugia en Yekta mientras siguen secuestrados: “Eres el mejor”
Yekta y Laçin se encargan de proteger a la hija de Ilgaz y Ceylin durante el secuestro.
Okan ha secuestrado a todos los que se encontraban en el despacho Tilmen. Entre ellos a Ceylin y a su hija Mercan.
El conductor de ambulancia está obsesionado con encontrar a un donante que pueda donarle un corazón a su hijo que está muy enfermo. Está dispuesto a todo, incluso a morir por su hijo, si hace falta.
Si Ilgaz y la policía no encuentran un donante compatible, él mismo elegirá a ese donante matando a los rehenes.
Al ver que el tiempo se agota, Okan divide a los rehenes en dos grupos. Por un lado, entre los que comparten el mismo grupo sanguíneo que el chico que necesita un corazón y en otra habitación a los que no podrán ser los donantes.
Ceylin puede ser una de las candidatas, en cambio Yekta y Laçin son trasladados a otra habitación. La abogada que ve como ella misma ha puesto de nuevo en peligro a Mercan y teme que sufra por ello, le pide a Okan que la pequeña pueda ir con Yekta y el resto ya que donde se encuentra ella hay una persona herida y podría haber más muertes.
Okan accede y Mercan se va con el abu Yekta que intenta seguir con la pequeña el juego que comenzó Ceylin con ella para que la pequeña no sea consciente del peligro al que en la vida real se están enfrentando.
“No te dejaremos solita”, le dice Yekta mientras la pequeña ya abraza a él diciéndole que es el mejor. ¡Qué bonito!